Cómo puedo estar en pie
si el dolor puede escribirse
cuando yo sueño contigo
y este amor ya no resiste
los reveses de la vida
que llenó de cicatrices
a los sueños de mi alma
que han perdido sus raíces.
Busco una vía hacia el cielo,
y es que hablé con querubines,
aquellos que me contaron
que las nubes no están tristes,
y si lloran de alegría
el verde se hace sublime.
Y debo quedarme aquí
mientras se hunde aquel esquife
en lo profundo del mar
a dormir entre arrefices,
y aunque todo sea negro
el consejo aún persiste;
ya habrá tiempo de llorar
cuando la vida termine.
Y debo quedarme aquí
como pena que persigue
poder verte cada día
y creer en lo increíble;
tu belleza metafísica
como el vuelo de los cisnes.
Aquí comienza el camino de nuevo. El presente avanza aunque yo no lo sienta y los días se consumen con la misma celeridad. Propuse recuperar los albores de los sonidos y no me considero un traídor. Así que, desafiando a todas las debilidades y deseos de desistir durante el tiempo necesario, y absorbiendo el dolor natural, doy el primer paso. Mi agradecimento infinito a quienes me siguen acompañando y desde el cielo estoy oyendo un aplauso.
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Es hermoso, podría decirse que no tengo mucho conocimiento de poesía pero estas palabras se resbalan cantarinas como emocionadas por su pronunciación, lo note porque lo recite en mi voz hecha un susurro y realmente es un placer de Dios.
ResponderEliminarPara mi, las únicas lagrimas que merecen caer por nuestro rostro son las de felicidad. No otras, y ni mucho menos cuando la vida termine, porque en realidad nunca lo hace, siempre esta presente ya sea en espirito y en el amor presente en los corazones que aun la recuerdan...
Muy lindas tus palabras, simplemente quede encantada. Ademas, quiero resaltar tu amor por la escritura, no te conoceré en absoluto e incluso es la primera vez que llego a tu blog pero se nota que en cada palabra plasmas un poquito de tu corazón y es algo que pocos escritores logran, tal vez exagero y no es lo que querías transmitir pero es lo que logre percibir...
Un beso enorme corazón de melocotón, te deseo éxito, felicidad y amor en tu vida.
Me dejas sorprendido gratamente, Meli. La verdad es que mi idea sobre la escritura ha ido evolucionando a lo largo del tiempo. Pero actualmente, quien lea tu comentario, muy hermoso, y te estoy agradecido por él, puede hacerse una idea bastante exacta del proceder a la hora de contar una historia. Sí que pongo corazón en lo que intento hacer, pero ese corazón, por supuesto, no es el momento presente. Pienso algo que haya sucedido o que me gustaría que sucediera y busco las palabras para formar versos con su metro y su rima.
EliminarTambién estoy de acuerdo conque las únicas lágrimas que merecen ser derramadas son las de alegría. Yo reconozco haber llorado por personas, y ahora, un tiempo después sé que ninguna se merecía esas lágrimas. No existe un ser humano por el que merezca la pena derramar llanto de dolor.
Gracias por las palabras que dedicas a este romance. Me ha gustado especialmente la alusión al "cantar" de las palabras. Si me ciño al metro exacto, por ejemplo, en este romance, todos los versos son de ocho sílabas, en un soneto, son de once. Y en una lira, el primero es siete, el segundo de once, el tercero y cuarto de siete y el quinto y último de once. Si me empeño en respetar esta regla es para intentar conseguir que suenen mejor. Pero la escritura tiene que fluir desde el interior, ha habido veces que solo me he centrado en que rimara bien, y cuando lo lees, se nota la superficialidad y la pérdida de encanto.
Gracias de nuevo por tu tiempo y tu visita. Un beso enorme para ti también, los vientos más propicios que puedan soplar en tu vida, y ojalá sigas pensando que merece la pena visitar este lugar.
No hay nada negro cuando las letras se escriben desde el color de tu dulce alma, nada permanece oscuro, ni siquiera las nubes tiemblan ni lloran lluvia, todo se vuelven del color del arco iris, tanto como la belleza de tu soneto que resuena desde la melodía de los sentimientos resbalando estrellas de luz y resplandor, no hay pesadillas porque los sueños se transforman en aves que vuelan hacia un mundo de luz.
ResponderEliminarBesos.
^_^.
EliminarMuchas gracias Carla. Acabas de arrancarle otra sonrisa al día y te lo agradezco mucho.
Esto es una historia que viene a decir simplemente que existe alguien cuya belleza alcanza el epíteto de metafísica. Y como no, está fuera del alcance de las almas normales. Entonces, empieza la espiral del dolor del perdedor... "por qué yo, si yo la quiero mucho, hay que ver, bla, bla, bla..." La alusión del cielo es la alusión romántica del "no merece la pena seguir" pero allí, los querubines, metaforizando la lluvia con el llanto, dicen que si llueve, luego el campo, es más hermoso. Y entonces, se entiende que es necesario seguir, que si se queda, al menos puede apreciar esa "belleza metafísica" (al ser más allá de lo físico, es la belleza que no marchita, la que permanece intacta si es que la vanidad no se acaba apoderando de las almas, cosa bastante común hoy en día). Y sigue, sigue contemplando ese vuelo de los cisnes, que es en sí mismo, un motivo para levantarse cada día.
Y estoy de acuerdo, amiga, no hay nada negro y si lo hay, se puede salir. Lo único negro que hay y de donde no se puede salir es el final, un final que tras producirse, todo deja de tener sentido. Así que tampoco hay que darle más vueltas.
Un besazo, Carla y mil gracias por tu compañía.
Hasta el color negro tiene su encanto, (es mi color preferido), y por el título: "Metafísica", lo primero que me has hecho recordar es el libro de Conny Mendez que lleva ese título, me lo leí en su día ya que me encantan esa clase de libros.
ResponderEliminarBueno, a lo que vamos, a tu lindo versar Juanjo; el dolor puede escribirse del color que uno quiera, aunque siempre se le relacione con lo negro, lo nefasto, la terminación de algo, pero no indica lo negativo, si no, fíjate por ejemplo en las fiestas, es el color preferido, el clásico, el que embellece la noche, el que estiliza el cuerpo, así que yo particularmente lo veo como el más elegante de todos.
Los sueños no se pueden controlar, pero fíjate,, tú que eres tan inteligente, sabes que el sol sale todos los días, y que cuando algo acaba, era porque no era lo que nos convenía en esos momentos, siempre habrá alguien esperando, alguien que vea los colores de la vida bajo el mismo iris que tú lo ves, y entonces, el negro te parecerá blanco.
Bello y nostálgico romance nos ofreces mi querido amigo, te veo muy pero que muy engrandecido ultimamente en tus letras, tu inspiración va más allá de todos los colores del arco iris. Feliz noche y un cálido abrazo lleno de colores.
El mío también Conchi ^_^. Mira que no creo en los horóscopos y esas cosas, pero no conozco a ninguna cabra a la que no le guste el color oscuro...
EliminarY la palabra metafísica tiene un sonido bonito. Me gusta, igual que miscelánea, que también me parece una palabra preciosa y aquí usabamos anglicismos como "cóctel" cuando se puede decir sencillamente, "mezcla"...
Y ahora, al versar, mi querida amiga ^_^.
Por supuesto que se puede llorar mirandoun arco iris y ser tan estúpido como para perder el tiempo pensando en lo que no se puede arreglar en lugar de contemplar tanta belleza y sonreír como muestra de agradecimiento por poder apreciar tanta belleza. Más aún cuando hay tantas y tantas personas que no pueden ver lo que ves tú en este momento. Pero también es verdad que el color negro se asocia a la tristeza (tengo que ver que referencia histórica basa esta creencia, bastante popular, por cierto).
Yo no creo las cosas se acaben o salgan mal porque en este momento no convienen. Es cierto que de un encuentro en la esquina de la panadería de barrio, puede nacer una historia de amor preciosa. O ya no amor, también una relación de amistad. ¿Cómo nos conocimos nosotros, Conchi? Por el azar más absouto, porque un día decidimos abrir un blog de estos donde poder poner las cosas que llenan nuestros mundos con el fin de compartirlo y mostrarlo al mundo. Y deambular tras deambular, llego el momento en que nuestros caminos se cruzaron... hasta hoy que sigue el sendero. Si las cosas no suceden como queremos que sucedan es porque entra en juego la libertad de una fuerza segunda, con poder de decisión. Y para esa fuerza, resulta que la oferta no es interesante. Si eso ocurre, arrastrarse, suplicando migajas es una actitud errónea, porque, aunque al final consigas que esté contigo, no podrá amarte con la intensidad que se necesita para que las cosas funcionen. Estaremos un tiempo hechizados, porque la persona ¿de nuestros sueños? está a nuestro lado, pero estoy convencido que el encanto dura lo que dura las pompas de jabón que los niños hacen desde el paseo marítimo. Pero esa persona ha accedido a estar con nosotros por la insistencia, y porque no tiene nada mejor a lo que agarrarse, no porque su corazón realmente lo desee. Entonces, si no somos correspondidos y queremos esperar a ver qué ocurre, adelante, se puede hacer, pero tienes guardar la distancia que marca la frontera del respeto... con todas sus consecuencias. O puedes seguir el camino, bordear en vez de la panadería, el mercado, porque allí habrá otra oportunidad de conocer algo que engradezca a la vida. Aunque pienso que lo mejor de todo es seguir tu camino sin pensar que tienes que encontrar a alguien. La soledad ofrece momentos muy interesantes también. Con el devenir de tiempo, se aprende a quedarte con lo bueno de cada experiencia y si llega el moemnto de que tras la vuelta de la esquina del videoclub aparece el mismo iris que el tuyo, entonces quizá sea el momento de que nazca un sueño. Bueno, también puede aparecer por el quinto pino, que los meetic y demás inventos macabros de los aburridos, parecen que están en auge.
Dicen que quien a buen árbol se arrima, buena sombra lo cobija. Y es lo que me ocurre a mí ^_^. Entre el afecto que siento en vuestas palabras, la admiración que despierta vuestro arte... las historias nacen solas y es un momento que estoy aprovechando. Ahora que el presente se ha estabilizado, porque desde marzo a junio... señor, que me quede como estoy. No vi pasar el tiempo. Quizá mañana el vagón de la montaña rusa diga, venga, para abajo, y el tiempo resbale entre los dedos como el agua entre los dientes, sin que se pueda hacer nada más que verlo pasar.
Un beso enorme de todos lo colores de nuestro sur, Conchi y mil gracias por tu empeño y presencia en este rincón humilde. Que tengas un fin de semana lleno de sueños cumplidos.
juanjo genial lo que ecribistes. te considero un magnifico poeta saludos carlos
ResponderEliminar^_^.
EliminarOtra sonrisa, compañero. Muchas gracias por tanto ánimo y tesón en cada cosa que arranco desde el fondo del alma.
Un abrazo amigo. Feliz fin de semana.