No prometo inventar palabras bellas
ni poner a tus pies el universo.
No prometo que no seré perverso
ni bajarte del cielo las estrellas
para poner tu nombre a alguna de ellas
No prometo lo que juran los versos,
ni que siempre estaré en el tiempo adverso
ni tampoco en el tiempo que destellas.
Puede ser que quizá mañana muera
o en el momento más inesperado,
dejando las palabras de un cualquiera
que había sin estar enamorado,
sin saber que traer la primavera
es tiempo sin poder ser a tu lado.

Aquí comienza el camino de nuevo. El presente avanza aunque yo no lo sienta y los días se consumen con la misma celeridad. Propuse recuperar los albores de los sonidos y no me considero un traídor. Así que, desafiando a todas las debilidades y deseos de desistir durante el tiempo necesario, y absorbiendo el dolor natural, doy el primer paso. Mi agradecimento infinito a quienes me siguen acompañando y desde el cielo estoy oyendo un aplauso.
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Hola Juanjo estoy de acuerdo en que prometer lo imposible solo lleva a decepciones, mejor disfrutar del momento e intentar estar ahí para quienes te necesitan, claro que la vida a veces nos sorprende y el tiempo prestado se acaba, por eso hay que disfrutar de cada día. Gracias por compartir.
ResponderEliminarHola bonita

EliminarClaro. Sólo por ese matiz de la llegada del fin en el momento menos esperado, ya todas las promesas dejan de tener sentido. Quizá es que le hemos dado un carácter eterno a las promesas y ese el error. Yo no veo mal que me digan "Hoy te prometo que estaré contigo" o "Ahora te prometo que voy a estar aquí". Pero he oído alguna vez eso del "siempre voy a estar aquí" y ese siempre ha durado un mes. Yo de nunca he sido de hacer promesas (bueno, si contamos que cuando te casas prometes, entonces sí, la he hecho y la he roto, razón de más para no prometer a nivel eterno nada). Además, tengo en cuenta el matiz de que el tiempo que gasto en prometerte la luna y el para siempre es tiempo que no estoy actuando en regalarte complicidad, y también me parece un error. No te prometo que te quiero, simplemente actúo para que tú lo veas en mis actos. Y ese es el mensaje que el soneto transmite.
Gracias por estas palabras, guapísima. Que tengas una noche llena de sueños cumplidos y cosas bonitas