SONETO LXXXVII "Sentimiento en poesía (2)".

Abrid el corazón y oid la historia
con el alma de azules sentimientos
en poesía que soplan los vientos
como gotas de luz en la memoria.

Mariposas camino de la gloria
susurran sus palabras y sus cuentos.
La magia de sus alas son cimientos
que llevan las tristezas a la euforia...

que llena de luceros a tu senda,
que logra la amistad de sus palabras
en un mundo que se hace corazón.

En las rimas del alma la leyenda
nace con la esperanza de que abras
una puerta directa a la emoción.



Emoción. Es lo que me embarga al regalar este soneto a mi mariposa azul, Kanet. Una persona a la que debo más de lo que ella se imagina y llegará a reconocer. Y ni aunque yo fuese la reencarnación del sin par Félix Lope de Vega, sería capaz de lograr algo que consiguiera expresar lo agradecido que le estoy a la vida por el día que la puso en mi camino.

Si queréis leer sobre todo dulzura e historias de amistad, tenéis que entrar aquí. Y ya sea ella la que escriba o alguno de sus colaboradores, hallaréis una historia que por norma general, en su variedad, deja un sabor de boca a sonrisas. Si se animan, deseo de todo corazón que disfruten lo que hallen.

Casi dos años ya... Y conversaciones incontables a nuestras espaldas. Palabras de risas, de consuelos, de intentar comprender lo que sencillamente no se podía comprender porque lo único que requería era aceptación. Te digo a menudo lo que eres para mí, hoy dejo versos que expresen la admiración que por tu grandeza siento. Un beso muy grande, mariposa azul de sentimiento azul y pureza celestial. Cruzo dedos por dibujarte una sonrisa. Y que los vientos propicios a tus sueños, sean los compañeros de tus alas.