lunes, 31 de agosto de 2015

ROMANCE CLXX "No hay motivos"

¿Cómo empiezo a olvidarte
si no hay ningún motivo
para echarte de mi vida
y eres lo que yo he querido
desde el día que nací
y tú aún no habías nacido?
He hecho tantas cosas mal
que ninguna me ha salido,
y me da igual otra más
si el que tú no estés conmigo
es la tristeza absoluta
y el mayor de los vacíos.
Lágrimas de soledad
que tienen el mismo brillo
que tu mirada de luz
que cada noche imagino
antes de cerrar los ojos
y seguir viendo lo mismo.
Descansando o caminando
esté despierto o dormido,
la constante en mi universo
es querer estar contigo.
Voy en contra de la lógica
pero no hay ningún motivo
para salir de la guerra
de los sueños malheridos,
de los corazones rotos,
si resulta que el camino
empieza y termina en ti
y sigo huellas de suspiros.
Voy mirando alrededor,
voy buscando algún resquicio
para huir de la tormenta,
hacia un punto indefinido,
de la ausencia de dolor
que hoy presiento infinito...
Pero si no es a tu lado
sólo hay sombras donde habito
y resulta siempre inútil
olvidar lo que persigo;
un futuro donde tú
equilibres mi equilibrio.
No es que no pueda olvidar,
es que no hay ningún motivo
para hacerlo ni intentarlo
porque sé que en el olvido
no me sentiré mejor
pues sin ti no existe alivio.
Una calle sin salida
donde sólo existe el frío,
donde sólo recordarte
es la oferta del destino.
Y aunque haya otras personas,
aunque existan otros ríos,
no existe nada más dulce
que tu mirar cristalino
desde siempre, transparente,
y que nunca será mío.
Sé que debo de olvidarte
pero no encuentro motivos...
Es el hecho de que existas,
la razón de seguir vivo
y es la esencia de tu vida
lo que siento si respiro.

5 comentarios:

  1. Supongo que sabes que me siento muy identificada con esto. La verdad es que a veces el único motivo para no dejar de amar es el maldito corazón que se empeña en lo imposible.

    Un beso ^^

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    1. Si te soy franco Tamara, este romance lo he escrito mirando únicamente mi existencia nefasta y llena de errores. Ni siquiera he pensado que podría haber personas que se sintieran identificadas, porque a diferencia de otras veces, que intento contar cosas de la vida, en esta ocasión sólo quería contar la impotencia de estar en una encrucijada, de saber perfectamente lo que tienes que hacer pero no tener los cojones suficientes para hacerlo.

      En este momento te abrazas a todo y crees cosas místicas sólo por necesidad. Enciendes una puñetera vela roja todas las mañanas para que dé luz al alma y le pides que sea posible un imposible, le dices que te importa un pito esperar lo que haga falta, pero que se cumpla, por Dios y por favor. Te abrazas a la variabilidad del tiempo, a esa certeza de que mañana puede caer un meteorito y mandarlo todo a la mierda como que puede hacer latir un corazón de un modo diferente. Y tú sabes que de todas maneras, por muchos dulces que haya en el mundo, te mentirías a ti mismo si crees que vas a ser feliz con otro. Sabes que esa mirada es inigualable, que esa sonrisa, es inigualable, que esa forma mágica y eléctrica de ser es todo lo que necesitas para dar sentido a tu vida y que tendrás que buscar mucho para encontrar algo igual. Y como te agarras a la esperanza de que todo cambie mañana, como esas historias que he escuchado de personas que han esperado diez, quince años al amor de su vida, que han sido fuertes y han sabido que no pueden sentir lo mismo por nadie más, Sabes que no tienes motivos para olvidar y el más importante de ellos es que simplemente, no quieres olvidar. Es una sensación muy dura y duele mucho. Es una calle sin salida donde sólo se te permite cerrar los ojos y verla, abrir los ojos y verla, soñar despierto y seguir viéndola...

      Sólo tienes la certeza de que esa persona ha calado tan hondo en ti que tu única salida es arrancarte el corazón para limpiarlo a base de golpes. Y abrazarte a esa esperanza que te inventas, a esa esperanza de que si estás ahí, siendo fiel a tus latidos, puede llegar la hora que su corazón despierte. Aunque en los pocos momentos de lucidez que tienes cuando estás tan ciego, sabes que si su corazón no se ha despertado ya, como se ha despertado el tuyo, será muy difícil que lo haga, y no digo imposible, porque la palabra imposible me da bastante miedo y respeto.

      Ahora, después de haber echado toda la frustración fuera, todo el sinsentido de saber que tienes que olvidar pero no quieres hacerlo, porque nadie hay que te haga sentir lo mismo, y porque nadie que ha tocado el cielo quiere volver a la tierra, me pongo a pensar y sí, creo que puedes sentirte identificada con esto. Y te lo digo de verdad que me sorprende, me sorprende que alguien como tú, tan eléctrica, se vea en esta situación. Conozco por encima la historia y creo que te lo dije, ese comportamiento no me parecía muy limpio. Luego la historia de los números (otra bola muy gorda) hablaban de un yonkie emocional y parece que así es. Y creo que tú misma habrás sentido la respuesta a la pregunta de si merece la pena seguir luchando o esperando. Puedes estar con otra persona, con varias si quieres, pero no sentirás lo mismo. Y no digo que no haya alguien en el mundo que pueda arrancarte las mariposas del estómago sin tanto dolor, pero a día de hoy, con el corazón totalmente entregado, no hay otra opción. No quiero olvidar. Y ese es el motivo principal para no hacerlo.

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    2. Flipo en colores :-?

      Mira un enlace que mi tía ha compartido por Facebook. Si antes hablamos de estas cosas, más tarda en aparecer algo así. Y vale, creo que sí, que dice cosas sensatas... Y ciertas. ¿Será que tenemos dentro una vena masoquista a la que le gusta llevarnos al límite? Si vuelves a leer la respuesta, échale un vistazo a esto: http://evolucionconsciente.org/aprende-a-regalar-tu-ausencia-a-quien-no-valora-tu-presencia/

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  2. Un anhelo perezoso encima de la cama
    la mirada perdida en los abismos
    allí, donde los recuerdos se guardan
    los labios entreabiertos … secos
    aún conservan el viejo sabor del ayer.
    La piel cayéndose a girones y, en cada trozo
    una huella de tus besos.
    Una decisión espera al final del camino
    detrás de ella, hay una luz
    resplandeciente … cegadora
    [si la observo de frente]
    al mismo tiempo
    lleva una carga infinita de paz
    que mi alma necesita.
    Hay una fecha de caducidad
    para el corazón que se duele
    y mientras … mi mano te sujeta con firmeza
    mientras se recuperan tus alas
    y alzas nuevamente tu vuelo.

    Un beso, Juan

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    1. :)

      Entiendo tu escrito como un texto que dice que tras la tempestad viene la calma. Y si ese es el mensaje que has expresado, sé que tienes razón. Que el olvido es sólo cuestión de tiempo, pero sigo diciendo que a día de hoy, es "problema" es que no quiero olvidar porque sencillamente, no tengo motivos para hacerlo.

      ¿No te ha pasado nunca que sólo el hecho de pensar en alguien basta para iluminar ese momento? ¿Que saber de una existencia le dé una razón a la vida para brillar? Seguramente sí. También es cierto que tras esa euforia de ilusión, pasa el tiempo y al no tener contacto, o al ver indiferencia a tus intentos para acercarte o para mantener un contacto, comienza el desencanto, y luego llega el vacío, el frío y la tristeza...

      Pasa tiempo y todos los jirones de piel se mudan por pliegos nuevos, el daño del dolor se debilita, quizá porque te has acostumbrado a él, y vas recuperando la calma, y es entonces eres consciente de que el tiempo es la medicina efectiva. Porque a día de hoy, te da igual, sólo estás rodeado de vacío y de silencio y la sensación de que eso va a ser así siempre, es poderosa.

      Aunque sé que dentro de un tiempo hablaré de otra manera (si es que vuelvo a hablar de vivencias propias, cosa que detesto), igual puede ser que dentro de un tiempo cambien muchas cosas, hoy sé que no quiero olvidar esta historia. Que entre todo el vacío del mundo, todo el silencio y toda la desolación, saber que existe alguien que ha conseguido derribar los muros (sólo para hacerte más daño), es un motivo para creer. Quizá para creer que eso es demasiado bonito para ti y seguir con tu autodestrucción y "subestimación", pero también para creer que el corazón sigue latiendo.

      Muchas gracias por tus palabras, Ame :)

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