Si tú pudieras quererme
te haría un nido de estrellas
en un cuarto hecho de luna
y un verso que ahora empieza.
Podría encerrar al viento
en la luz de mi poema,
y que rozara tu rostro
cuando la noche se duerma,
en el color de tus ojos
a la luz de siete velas.
Podría inventar palabras
que a tu cara describieran
porque éstas que hoy existen
se me quedan muy pequeñas
para hablar los sentimientos
que me inspiran tu belleza.
Podría tocar la espina,
ser escudo que proteja
a la luz de tu sonrisa
de la flor de la tristeza.
Pero no, tú no me quieres
y aunque nadie lo comprenda,
me conformo con saber
que mis sueños tienen dueña,
una dueña que es un sueño
que querer la vida entera.
Pero no, tú no me quieres,
nunca ganaré la guerra
que declara el corazón
vestido de primavera,
mas me basta con saber
que mi sueño ahora sueña
con la más bella mujer
que ahora es dueña de mis letras.
Aquí comienza el camino de nuevo. El presente avanza aunque yo no lo sienta y los días se consumen con la misma celeridad. Propuse recuperar los albores de los sonidos y no me considero un traídor. Así que, desafiando a todas las debilidades y deseos de desistir durante el tiempo necesario, y absorbiendo el dolor natural, doy el primer paso. Mi agradecimento infinito a quienes me siguen acompañando y desde el cielo estoy oyendo un aplauso.
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Ainsss Juanjo, que belleza de romance. La dueña de tu sueños si supiera que le escribes, bien pudiera sentirse orgullosa de despertar esas letras, esos sentimientos e quizás sí, bien pudiera creer y quererte.
ResponderEliminarHas usado la palabra "nunca" junto a "ganar una guerra", yo también soy partidaria en este caso de no usarla, pues eso nunca se sabe, puede surgir cualquier causa que haga que la tortilla se gire y no se queme, resultando ésta sabrosa para el comensal, por lo tanto si tu corazón dice que en ésta guerra él tiene algo que decir, déjale que diga y si puedes hazle caso, igual él es capaz de ganar lo que con la cabeza no se puede.
Precioso, en verdad que si.
Ten un buen día y que no te den mucho la vara, ni hoy ni en la semana esta tan revuelta que tienes.
Besitos azules y gracias por todo querido mío, muasssssssssssssssss
Una preciosidad de poema en el que el protagonista estaría dispuesto a hacer incluso lo imposible con tal de obtener el amor de la persona adorada. ¿Y quien no? ¿Acaso alguien puede admitir que en algún momento de su vida no estaría dispuesto a pactar con el diablo cual Fausto con tal de alcanzar lo que se sabe inalcanzable?
ResponderEliminarMe ha encantado que hayas incluído entre tus versos claves mágicas e imposibles de pasar desapercibidas para los espíritus sensibles: las siete velas (número mágico)iluminando la noche, un nido de estrellas en un cuarto de luna, tocar la espina y ser el escudo que proteja la flor de su tristeza... ¡qué bello comparar la tristeza con una delicada flor que igual que esta va tirando pétalos del mismo modo que el alma arroja las lágrimas...!
Y pese a la aflicción que confiere la certeza de lo imposible el protagonista se conforma con saber que no todo está perdido, que al menos sus sueños tienen dueña, su inspiración musa y sus letras destino. No veo conformismo, veo más bien un amor desinteresado y quizás por ello hermoso.
Me alegra leerte tras unos días de silencio, querido poeta. Espero que la inspiración fluya y nos sigas deleitando con tus versos.
Un beso y feliz inicio de semana.
Kanet, muchas gracias por estas palabras. ¡Con razón echo de menos los dias en los que las musas se van a otro lado o el tiempo se evapora! ¡Porque faltan estas palabras!
ResponderEliminarEl romance viene a contar una historia de alguien que sabe perfectamente que no es —y probablemente no será— correspondido. Sin embargo, tienes razón, la palabra nunca es muy peligrosa y pueden pasar mil años y entonces, cambiar lo que hoy es una verdad absoluta. Desconozco si una mujer que lea esto y sepa que va dedicado a ella se le removerá el universo en el estómago, si sabe que el autor es un hombre que ella no quiere, que no puede amar aunque lo intente (a fin de cuentas, el que intenta amar, comete un error mayúsculo, porque no es una proposición, es un sentmiento y no se trata de intentar, sino de sentir).
Las gracias te las doy yo a ti y sabes bien por qué. Al final se han apiadado de los pobres desgraciaditos del señor del almacén y han distribuido el trabajo mejor. Ya bastante tuvimos la semana pasada ^_^. Te deseo una semana espléndida y que todos tus deseos se hagan realidad. Por cierto, tu amigo de alma acaba de aparecer en el horizonte después de un día nublado y agradable. Ya me empiezo a hacer mil cruces ^_^.
Akasha, no solo estás en plena forma en tu escritura sino que además tienes tus facultades para captar mensajes subliminales están intactas y son magníficas. Y además el sonrojo ante tal comentario es invetable.
ResponderEliminarCuando alguien ama, entendamos amar como ese primer momento donde todo el universo se tiñe de arco iris, donde nada es imposible y todo lo que no sea ser feliz está de más. A partir de ahí, por supuesto que firmas un contrato con quien sea, en el que hipotecas tu corazón con tal de que esa persona (endiosada en este momento) esté a tu lado. Muy bueno en simil de Fausto, genial. Sí, se pueden comenter incluso locuras más locas que las de Fausto por amor.
Cierto, no hay conformismo. Él quiere hacer mil cosas a su lado, sueña con estar a su lado en cualquier momento, pero es consciente que no es posible, porque en este caso, los dos corazones no laten al mismo son. Pero también sabe que es amor lo que siente y que haría todo lo que dice y todo lo que le pidiera que hiciera. Y aún así, sería muy poco. Más que conformismo, es acdeptación de las normas y quedarse con los latidos de sentimientos, mientras éstos duren, porque, como bien dice Kanet, es posible que mañana sea distinto. "Todo fluye" decía Heráclito de Éfeso.
Graicas por tus palabras y por supuesto que al menos, intentaré seguir contando historias en estos metros de corte clásico. Aunque a veces tardan, al final acaban saliendo, porque hay alguien que espera, deben salir.
Un besito y feliz semana que está comenzado.