Voy camino del silencio
de un ejército de estrellas
bajo la noche de mi alma
y la música soltera.
Mis ojos se han cerciorado
que eres de otro compañera,
y el dolor es tan intenso
como duras son las piedras,
porque es a él a quien abrazas,
porque es a él a quien tú besas.
Es tan necio hacerse el fuerte
cuando sólo quedan penas
que me duele hasta el bolígrafo
que dibujan estas letras.
Y si antes fue imposible
abrazarte de emergencia,
ni siquiera ahora puedo
dibujarte en esta arena
para abrazarte dormida,
bajo tu piel de sirena,
para tenerte a mi lado,
para cuidar lo que sueñas...
Aquí comienza el camino de nuevo. El presente avanza aunque yo no lo sienta y los días se consumen con la misma celeridad. Propuse recuperar los albores de los sonidos y no me considero un traídor. Así que, desafiando a todas las debilidades y deseos de desistir durante el tiempo necesario, y absorbiendo el dolor natural, doy el primer paso. Mi agradecimento infinito a quienes me siguen acompañando y desde el cielo estoy oyendo un aplauso.
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Es cierto que aunque la adolescencia parece la época más social de nuestras vidas, también suele ser la más introvertida.
ResponderEliminarBonitas palabras Juanjo, un beso.
Es una época de descubrimientos y contraste que nos descolocan y que nos pone a prueba constantemente. Se carece de la experiencia necesaria para tomar las cosas con un poco más de calma, que es la mejor manera de tomar las cosas cuando los sueños y los deseos son tan intensos.
EliminarHa sido una experiencia agradable haber retrocedido en el tiempo y recordar la emoción y el dolor que se sentía cuando ocurría que los sueños que quieres cuidar, ya tienen custodio y te quedabas con tal nudo en el pecho que pensabas que de esa no salías ^_^.
Muchas gracias, preciosa, por tu tiempo y tus palabras. Que tengas una noche tan bonita como tú. Un besito grande.
Hola Juanjo, los amores no correspondidos son difíciles de sobrellevar, aunque supongo que a cualquier edad. Cierto es que en la adolescencia todo toma otra dimensión. Muy bonito este romance triste. Gracias.
ResponderEliminarGracias a ti, preciosa, por regalarme tu tiempo, como siempre.
EliminarSupongo que es por la inexperiencia y por el descubrir los impulsos y la energía que el amor ofrece a quien lo siente. Quería escribir algo sobre esa energía y ese impulso inocente y tan fuerte y conforme iba escribiendo el romance viró hacia la tristeza, hacia ese dolor que en las primeras edades de la vida, parecen insuperables y muy trágicos. Quiero cuidar lo que sueñas, quiero cuidar lo más importante que tienes, pero no me amas, amas a otro y encima, estamos seguros que el "afortunado" no se porta bien con ella. No sé ahora, pero hace 20 años, cuando yo tenía 15, todos teníamos una historia así a nuestras espaldas.
Que tengas una noche llena de cosas tan bonitas como tú, y de sueños cumplidos. Gracias por tu tiempo y tus palabras.