Qué tristeza aunque seas la princesa
en este frío cuento del invierno,
que antes de mí, te dio príncipe tierno,
que a tu vida llenó con su promesa.
En este cuento mi alma queda presa
de las letras que ordenan llanto eterno
al vivir para siempre en el invierno
de tener que ver cómo otro te besa.
Le pongo corazón y me rebelo
contra la oscura mente del autor
que pretende llenar el alma de hielo.
No es así, debe haber otro color
que me lleve a las puertas de tu cielo
y luchar para siempre por tu amor.
Aquí comienza el camino de nuevo. El presente avanza aunque yo no lo sienta y los días se consumen con la misma celeridad. Propuse recuperar los albores de los sonidos y no me considero un traídor. Así que, desafiando a todas las debilidades y deseos de desistir durante el tiempo necesario, y absorbiendo el dolor natural, doy el primer paso. Mi agradecimento infinito a quienes me siguen acompañando y desde el cielo estoy oyendo un aplauso.
:)
:-)
:))
=))
:(
:-(
:((
:d
:-d
@-)
:p
:o
:>)
(o)
[-(
:-?
(p)
:-s
(m)
8-)
:-t
:-b
b-(
:-#
=p~
:-$
(b)
(f)
x-)
(k)
(h)
(c)
cheer
HOla Juanjo
ResponderEliminarSupongo que cuando pierdes a la persona amada, esa que era tu princesa, tu centro , tu eje ... todo dentro de ti se revela,todo tu ser protesta de dolor, por la conmoción. Tu vida queda desolada como en un ambiente de invierno yermo y frío, duro... Pero la vida sigue
Muy bueno como siempre, pero triste y un poco desolador.
un beso enorme y empieza bien la semana
Mi querida Ana, más que perder, el texto cuenta la historia de alguien que siente que su vida está siendo escrita por alguien empeñado en ponerle las cosas difíciles. La mujer de la que se enamora ya tiene su "príncipe tierno que la llena de promesas", pero el protagonista es tan cabezón (normal, si es un hijo ilegítimo del sin remedio que escribe) que se han empeñado en desafiar al autor de ese "cuento triste" y pelear por al amor de su amada hasta el final de los tiempos.
ResponderEliminarSí, preciosa, este es triste y desesperanzado, otro capítulo más de lo que es la vida a fin de cuentas.
Un besito muy grande e igualmente que tu comienzo de semana sea hermoso y propicio.
Hola mi querido Juanjo, es triste este soneto, lo lees y te quebranta el alma, al percibir ese dolor, esa angustia del protagonista de este soneto.
ResponderEliminarDura debe ser llevar esa carga encima, querer tanto, hasta la desmedida y que ella no esté libre, respetarla aún así y aguardar con ilusionada esperanza, haciéndole partícipe de que estarás ahí por siempre, para lo que ella precise, que siempre tendrá una mano amiga donde cogerse si se tercia.
Es una mala situación para cualquiera que se encuentre en esa posición, se revela por ello y lanza un grito desesperado, maldiciendo su suerte, aunque nadie le oiga y así coger aire renovado para seguir su día a día, en esa lucha por su sueño.
Es hermoso mi querido poeta sureño, pero realmente triste.
Ten una buena semana querido mío, besitos azules muassssssssssss
Mi querida Kanet, sí, realmente, es una historia triste... Pero en mis matices y viendo la vida como la veo, el protagonista sigue empeñado en desafiar incluso al autor de su propia historia y si le duele, es por propia decisión. Creo que no puede echarle la culpa de eso a nadie salvo a sí mismo. Y eso, el dolor buscado y la tristeza buscada, no es digno de compasión. Si se decide luchar contra viento y marea (que ahí entonces sí que estoy de acuerdo) no puede ser lamentando nada. Si decides algo y el dolor te distrae, el batacazo que se va a meter va a ser pequeño... Y si ve que no es capaz de no sentir dolor, sinceramente, lo mejor que puede hacer es rendirse. Peeeeeeeero, ahí está el objetivo de las rimas del alma, contar una historia que refleje la vida, y sé de mucha gente que puede verse reflejado en estos versos sin ningún problema. Con textos así, pretendo ver hasta donde llega mi versatilidad con historias, que no necesariamente, tienen que ser mías y mucho menos, del momento presente.
ResponderEliminarUn besito muy grande, mi mariposa azul, espero igualmente, que tengas una bonita semana.
Me ha hecho esbozar una sonrisa una de las frases que han brotado de tu magín:
ResponderEliminar"...el protagonista es tan cabezón (normal, si es un hijo ilegítimo del sin remedio que escribe)".
Bueno,digamos que todas las musas que se pasean lánguidas por tu rinconcito estamos encantadas con el sinfín de despropósitos que a menudo deambulan por tu mente y se dejan ver, y esa sin duda es una de las cualidades que te engrandecen a nuestros ojos: que seas simplemente tú, un humano plagado de defectos y con numerosas virtudes que lo acompañan.
Nada que objetar con respecto al meollo del soneto de hoy (de ayer, ciertamente). Me parece justo que cada quien sea consecuente con las decisiones que toma en su vida, que se aventure a luchar aunque la causa a simple vista esté perdida de antemano, que no existan rayos o truenos celestiales capaces de apartarlo de su camino, de la senda que su corazón le marca y que se mantenga firme y fiel a sus principios (volvemos a la lira de ayer). Como bien dices, si se decide luchar contra viento y marea ha de saberse lo que se viene encima y sentirse lo suficientemente fuerte como para afrontarlo.
Me ha gustado eso de que el sufrimiento buscado y la tristeza buscada no son dignas de compasión... (creo que es el peor sentimiento que podemos inspirar en alguien), aunque la mayor parte del tiempo nos empeñemos en caminar por sendas que no hacen más que reportarnos daño.
Un beso enooooooorme y prosigo leyendo.
Mi querida náyade preciosa, el texto es muy simple, realmente. Y cuenta una historia que como bien apuntas, viene bien al empeño de las criaturas de caminar sendas llenas de espinas para poder llegar finalmente al bello rosal que espera al final de ese sendero difícil y lleno de obstáculos. En él este protagonista, hijo ilegítimo del sin remedio que escribe ^_^, no está de acuerdo con la vida que el autor de su historia parece haber elegido para él y se rebela, le pone corazón y está empeñado en pelear por lo que él cree que es su plenitud. Efectivamente, y aunque aplaudo la idea de pelear por un sueño y alejarse del conformismo que a la larga otorga hastío, no estoy de acuerdo que la lucha se tenga que desarrollar en el constante dolor. Con las heridas que recibirá en esa batalla, unos días que vendrán peor que otros, ya tendrá suficiente como para permitirse el lujo de empezar con el dolor ya presente. En ese estado, yo le recomendaría que abandonase, que echase a correr y se perdiera hasta que el tiempo cicatrizara sus heridas, porque de lo contrario, el golpe que se a a pegar será muy grande. Y me reafirmo, quien se mete en las puertas del infierno por decisión propio, creo que no es digno de compasión, pero no es algo que uno necesite de los demás. Es su guerra, y si consigue ganar, aunque todo parezca apuntar que la derrota es segura, ohtendrá el rosal deseado y la plenitud a su lado. Creo que merece la pena, pero no deja de ser mi opinión.
ResponderEliminarMis reverencias, hechicera de las palabras. Un besito en tus manitas de luna y lavanda rocíadas de azahar.